El pasado 29 de abril del año en curso, la DIAN presentó el informe denominado “Panorama del Contrabando en Colombia” en el que presenta el escenario del delito de contrabando en Colombia entre los años 2018 y 2022 y las diferentes iniciativas que se han ido desarrollando para contrarrestarlo.

Según datos de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, en 2022 pasaron por los puertos de todo el mundo alrededor de 425 millones de contenedores de los cuales casi dos millones ingresaron a Colombia cargados de mercancías. Dicha cantidad de flujo en los puertos del país, la complejidad del comercio internacional y la imposibilidad de inspeccionar cada carga que llega, hacen que la medición del contrabando sea una tarea de gran desafío para la Administración.

Pese a ello, el control al contrabando se logra medir, entre otras herramientas, a través de la comparación entre las importaciones legales y las retenciones de mercancía, es decir, las aprehensiones. Gracias a esta herramienta se pudo evidenciar que, en Colombia, entre los años 2022 y 2023 las aprehensiones crecieron un 46% en proporción a las importaciones. Por su parte, entre los años 2018 y 2022, se tuvo una tendencia creciente del delito de contrabando pues el 10% de las mercancías que ingresaron al país se hicieron a través de ingresos al territorio aduanero nacional sin una declaración de importación (contrabando abierto) o con una declaración de importación con información errada (contrabando técnico).

China con un 30% del total de contrabando en Colombia, Estados Unidos con una participación cerca del 10% del total, seguidos de Bolivia, Panamá y Brasil son los cinco (5) países de donde provienen la mayoría de las mercancías que ingresan al país como contrabando.​