Este proyecto de Ley busca cambiar las tarifas de energía, asegurando que las empresas sean sostenibles y protegiendo los intereses de los usuarios. Propone que la CREG cree una nueva fórmula que reduzca pérdidas en el servicio, sin que los usuarios paguen por la falta de inversión. También sugiere financiar mejoras en la infraestructura eléctrica con recursos específicos, sin afectar las tarifas. El proyecto incluye sanciones para quienes hagan conexiones ilegales, tanto en el ámbito disciplinario como penal.