La legislación laboral colombiana ha pasado por alto un hecho evidente: las personas que trabajan de pie necesitan sentarse, especialmente después de una o dos horas. A pesar de las implicaciones de trabajar de pie, cientos de miles de personas en Colombia laboran en estas condiciones, con jornadas que varían de 4 a 12 horas, a menudo sin poder sentarse ni hacer pausas.

La “Ley de la Silla” busca corregir esta situación de manera sencilla pero significativa. Propone que las empresas proporcionen un número suficiente de sillas con respaldo para que los trabajadores puedan sentarse tanto durante sus funciones, siempre que la actividad lo permita, como durante los descansos periódicos a lo largo de la jornada laboral. En los casos en que el empleador utilice la tercerización o intermediación laboral, será igualmente responsable de cumplir con esta obligación.

Por otra parte, será ilegal obligar a los trabajadores a permanecer de pie durante toda la jornada si sus funciones pueden realizarse desde un asiento. Según la modificación del artículo 59 del Código Sustantivo del Trabajo, se adiciona el numeral 10 que establece: "Obligar a los trabajadores a permanecer de pie durante la jornada laboral, siempre y cuando las funciones puedan desempeñarse desde un asiento."

Igualmente la normativa propuesta modificaría la distribución de las horas de trabajo, exigiendo que las jornadas se dividan en al menos dos secciones con un intermedio de descanso que se adapte a la naturaleza del trabajo y las necesidades de los trabajadores. Durante la jornada laboral, cada dos horas se habilitará un espacio para que los trabajadores que sólo pueden desempeñarse de pie tengan la oportunidad de sentarse. Estas pausas, junto con las pausas activas ya establecidas por la Ley 1355 de 2009, serán reglamentadas por el Ministerio de Salud y Protección Social, garantizando que todos los trabajadores tengan pausas ajustadas a sus necesidades de salud durante la jornada laboral.

En conclusión, la "Ley de la Silla” promueve el bienestar y la salud de los trabajadores al asegurar que quienes laboran de pie tengan oportunidades regulares para sentarse.